Evo Morales amenaza con un golpe de estado
"En vano algunos desde Estados Unidos están planificando que la derecha va a volver. A ver si esa derecha gana, aguanta", declaró, enfatizando su disposición a defender los recursos naturales de Bolivia.

En un acto multitudinario en la región cocalera de Cochabamba, el expresidente Evo Morales emitió una severa advertencia a los candidatos de la oposición, afirmando que si alguno de ellos logra ganar las elecciones del próximo 17 de agosto, deberán enfrentar las consecuencias.
Las declaraciones de Morales se producen en un clima de creciente tensión política y social en Bolivia. Su partido, el Movimiento Al Socialismo (MAS), ha estado en el centro de un conflicto interno desde 2021, cuando surgieron disputas sobre el control del partido y la candidatura presidencial. Morales, quien busca un cuarto mandato, ha enfrentado obstáculos legales que le impiden postularse, después de que la justicia falló en favor del actual presidente Luis Arce.
La reciente movilización de sus partidarios fue impulsada por el deseo de forzar su candidatura, lo que llevó a bloqueos en múltiples regiones del país. Estos bloqueos, que duraron más de 15 días, han generado pérdidas económicas significativas, estimadas en más de 1.000 millones de dólares. Además, han ocasionado enfrentamientos violentos, resultando en la muerte de al menos seis personas, según reportes del Ministerio de Gobierno.
Morales también dejó claro que su movimiento está dispuesto a defender los recursos naturales de Bolivia de lo que él describe como intentos de "adueñarse" de ellos por parte de candidatos de la oposición. "El movimiento indígena y popular va a defender su amada Bolivia", subrayó, haciendo eco de un sentimiento nacionalista que resuena entre sus seguidores.
La situación actual y el futuro electoral
En medio de este ambiente tenso, el entonces ministro de Justicia, César Siles, presentó una denuncia penal contra Morales por terrorismo y otros delitos, tras la difusión de un audio que supuestamente lo involucra en la planificación de acciones violentas. Morales ha negado cualquier implicación y ha denunciado la falta de transparencia en el proceso electoral.
Con las elecciones programadas para el 17 de agosto, se espera que 7,5 millones de bolivianos acudan a las urnas para elegir presidente, vicepresidente, senadores y diputados. Según las encuestas, los candidatos opositores Samuel Doria Medina y Jorge Quiroga se perfilan como favoritos, mientras que el sucesor de Morales, Andrónico Rodríguez, ocupa el tercer lugar.
La polarización en la política boliviana se intensifica, y las manifestaciones del evismo no solo complican el panorama electoral, sino que también agravan la crisis económica del país, evidenciada por el aumento de los precios de los alimentos y la escasez de combustible.
A medida que se acerca la fecha de las elecciones, la incertidumbre y la tensión en Bolivia continúan en aumento. La situación demanda atención tanto a nivel nacional como internacional, dado el potencial impacto en la estabilidad política y social del país. La advertencia de Morales sugiere que el camino hacia las elecciones estará marcado por desafíos significativos y un clima de confrontación.
Redacción con información de Infobae